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Retenedores: su importancia después del tratamiento


Concluir un proceso ortodóntico no marca el fin del tratamiento dental, sino más bien el inicio de una nueva etapa crucial: la fase de retención. Esta fase es esencial para mantener los resultados obtenidos y asegurar que los dientes permanezcan en su nueva posición una vez que se han retirado los aparatos ortodónticos, ya sean brackets, alineadores o alambres.

Es importante entender que la memoria dental tiende a hacer que los dientes regresen a su posición original, por lo que el uso de retenedores al finalizar el tratamiento ortodóntico es fundamental, independientemente del sistema utilizado. La elección entre un retenedor removible o fijo depende del criterio del especialista a cargo del tratamiento.

Existen varios tipos de retenedores recomendados para evitar que se pierda el alineamiento dental logrado: los retenedores fijos y removibles. Los retenedores fijos proporcionan una retención continua de forma permanente, sin requerir la intervención del paciente, mientras que los removibles son más cómodos al poder retirarse y colocarse según sea necesario.

Entonces, surge la pregunta: ¿Por qué es importante considerar los retenedores?

En conclusión, los retenedores deben ser considerados como aliados silenciosos que trabajan constantemente para prevenir cualquier tipo de desplazamiento dental no deseado, asegurando así la estabilidad y el éxito a largo plazo del tratamiento ortodóntico.

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